sábado, 4 de marzo de 2017

CLUB ROTARIO DE ZACAPU

Banamex en mis tiempos, trabajé ahí del 8 de junio de 1954 al 30 de abril de 1974 (20 años menos un mes ocho días) nos otorgaba algunas prestaciones sociales a determinados funcionarios, normalmente gerentes, algunos subgerentes y contadores y a otros funcionarios de sucursales importantes o de dependencias de dirección. En el caso de los gerentes y subgerentes recomendaba los clubes Rotario, Leones o algún otro que en sus respectivas plazas fuera más preponderante entre la comunidad, recomendando renunciar a las presidencias respectivas y aceptar otro cargo honorífico como la tesorería. 
Así en mi primera estancia en la sucursal Guadalajara de mayo 1961 a agosto de 1963 como Jefe del Departamento de Análisis de Crédito de la Sucursal Guadalajara y como tercer Subcontador, me inscribió en el Club Deportivo Guadalajara, al que en realidad muy pocas veces pude asistir por darle preferencia a mis responsabilidades específicas de trabajo y los domingos, todavía trabajábamos los sábados, me sobraban invitaciones de familiares y amigos, o me iba a ver a mis padres y parientes en Atotonilco. En Zacapu ingresé a los Rotarios y mi subgerente Jorge Alcaraz ya estaba en el de Leones.     
Rotary se manejaba ahí realmente en la inercia y a la deriva con 6 o 7 socios en su nómina y cuóroms de asistencias en promedio de 3 o 4. Lo presidía entonces el Sr. Jesús Arredondo del que su hermano José era el principal político de la ciudad y hombre de negocios importante. Solamente se necesitaba moverlo un poco y enriquecerlo con nuevos integrantes, para lo que en el sector empresarial y profesional había prospectos de sobra. El Sr. Arredondo vio mi actitud en Banamex y en algunas convivencias, entre ellas una de bienvenida ofrecida por su hermano el magnate político y empresarial. Me invitó al club ostentándome como un miembro natural de los principios del organismo, sin necesidad, decía él, que tuviera la investidura correspondiente.
Desempeñando el citado cargo de Tesorero, logré ingresar varios socios con cierta facilidad respaldado por la preponderancia del banco y, sin falsa modestia, la imagen que en lo personal había logrado como gerente. Cuando regresé a Guadalajara a la gerencia de la sucursal Independencia, en septiembre de 1970, dejé a Rotary Zacapu con 27 miembros activos, con todo y bajas de algunos por la rotación de funcionarios principalmente en el complejo industrial de Celanese Mexicana, pero muy firmes los del sector empresarial y profesional zacapense.  
En armonía con el presidente del club en turno, ya había terminado su gestión don Jesús, propuse varias acciones comunitarias. Empecé elaborar un boletín mensual vocero del grupo que se abandonó a mi traslado y tercer destino a Guadalajara.   
Rotary Internacional fue fundado por  Paúl Harris el 23 de febrero de 1905; su domicilio actual se encuentra en Evanston, Ill, EUA; tiene clubes en más de 200 países; siendo exclusivamente para varones, a partir de 1989 se aceptó al género femenino. La regla primordial de la organización es tener en su seno la representación en las personas más adecuadas de cada actividad empresarial y profesional de su entorno, con un máximo, en su caso, de un 10% de socios correspondiente. Al fundador se le relacionó con la masonería que se encargó de rechazar firmemente hasta por escrito. En varios países, incluso México, la agrupación ha tenido, como toda institución sobresaliente, detractores de diversos tipos, pero las actividades y programas que ha instituido hablan bien de su cometido.
Algunos rotarios famosos han sido o son: el Papa Francisco, Luciano Pavarotti, Dr. Carlos Canseco, Mario Moreno “Cantinflas” John F. Kennedy, Douglas MacArthur, Cecil B. de Mille, Claude Vuitton, Franz Lehár, J.C. Penney, Manny Pacquiao, Beyoncé, Rihanna, Bill Gates, Walt Disney, varios presidentes y políticos de diversos países, etc. etc.            

MARIACHI EN LA SUCURSAL


El 5 de febrero de 1971 o 1972, como a las 11 o 12 del día, entró al patio de público de la sucursal Independencia Guadalajara en Calzada Independencia y Aldama, mi amigo y cliente don Antonio Antón Corona dueño de la empresa Escobas Barre Barre y creo, funcionario en las áreas administrativas de la organización Calzaletas. Lo acompañaba un magnífico mariachi tocándome Las Mañanitas con motivo de mi cumpleaños y santo. Por la sorpresa y no esperando el gesto de amistad del Sr. Antón, se tocaron una o dos canciones más para pedirle de la mejor manera que terminara el festejo.  
Aunque en la Dirección Occidente del banco, a cargo de don Adolfo Sánchez Medal, no me llamaron para nada al respecto, desde luego indagaron, porque en reuniones posteriores de gerentes y funcionarios no faltó quien me preguntara y felicitara por el detalle del cliente. Como testigos de la anécdota hay varios miembros del personal de entonces en la sucursal, que también forman parte del Grupo Amigos Banamex Guadalajara, que manejo desde enero de 1996.   
A esas alturas traía ya muy fija la idea de dejar al banco para dedicarme a negocios por mi cuenta, sin manifestarlo en ninguna forma y sin descuidar para nada mi trabajo en Independencia a la que había llegado en septiembre de 1970, haciendo efectiva mi renuncia el 30 de abril de 1974, a un mes y 8 días de cumplir 20 años en Banamex, en la forma que en relatos aparte describo con amplitud.