lunes, 15 de junio de 2020

UN "MUY BUEN" NEGOCIO

Tenía unos meses en la gerencia de Banamex en Zacapu, Mich., tomada a partir de enero de 1969.
-Muy buenos días señor de la Torre, muchas felicidades por su nombramiento como gerente aquí en Zacapu. Soy N. B. primo hermano de N.N.B. que usted ya conoció en Guadalajara. Soy Agente Regional del Banco de Crédito Rural y vengo, recomendado por mi pariente a proponerle un gran negocio en que nos puede ir muy bien económicamente.
-Diga usted
-Aquí en la región somos los mandones en soltar dinero para la porcicultura, en lo que podemos ponernos de acuerdo e ir a mitas en el negocio. 
-Aperturas de Crédito de Habilitación o Avío y Refaccionario con Garantía Hipotecaria
-Eso mero
¿Y en qué consiste?
-Mire, usted sabe la enorme cantidad de familias que en esta ciudad se dedican a la porcicultura, normalmente con instalaciones en sus casas
-Sí, por supuesto, y usted debe saber que desde que llegué estoy impulsando esta actividad
-Sí, y conozco el volumen de operaciones que luego ha realizado. Tengo un grupo de comerciantes amigos muy pudientes de Zacapu como posibles postores cuando los deudores no puedan pagar sus créditos, porque con ese fin les prestamos más de lo que podrán pagar y con una no muy atinada asesoría financiera, así al fin rematamos sus fincas y granjas
-Mire mi amigo, por respeto a mí mismo, a la profesión bancaria, a los usuarios, y hasta los personajes adinerados que me ha mencionado, no voy a malgastar mi opinión calificando su “propuesta” Tampoco voy a tomar en cuenta que ésta existió, ni que fue usted el autor; le pido se retire y como si nunca nos hubiéramos visto
-Pues usted se lo pierde
-¡Adios!
¿Alguna diferencia con lo que ha sido y es la manera de actuar, con sus raras excepciones, de nuestros gobernantes y subalternos en nuestro país y, desafortunadamente, de no pocos funcionarios jefes y empleados del sector privado?
N. B. y N. N. B. tienen nombre y apellido que por razones más que obvias no menciono. El segundo dentro de Banamex, fue uno de los prietitos en el arroz que, para mayor desgracia, con cabezas más altas en coparticipación, usufructuó para mal su cargo.
Recomiendo leer la serie de mis relatos que inician con Banamex y colaterales como el presente, incluyendo el trío Chupatintas (un poco más de 40) publicados en este blog.